dimecres, 5 de març del 2014

Nasty Birthday!





Ja han passat 9 anys des de que els DJ's Sören i Madmax conjuntament amb la Sala Apolo decidissin fer una proposta més que arriscada: fer festa els dilluns. I no només això, fer festa els dilluns... amb música rock i indie! Una cosa inconcebible per molts ha esdevingut una de les festes de referència de la ciutat comtal (tant autòcton com estranger).

I és que des de que aquesta parella van començar al Fonfone del carrer Escudellers de Barcelona que viuen en un somni: fer allò que els agrada, i tenir a gent al darrera que els hi paga i els va a veure.


En motiu del novè aniversari de Nasty Mondays celebrat el passat dilluns 3 de març, us deixem amb l'entrevista feta al DJ Madmax, un dels protagonistes de la festa.

Esperem que la gaudiu, fins aviat família!



ENTREVISTA

I ara amics ha arribat el moment de saludar a una persona molt important per a nosaltres. Feia temps que estàvem esperant per a entrevistar-lo tant a ell com al seu company d’aventures, que avui no està, però no passa res. Estem parlant del DJ MadMax, una de les cares visibles de la festa Nasty Mondays de la Sala Apolo, una referencia per als amants del bon rock i de l’indie. Amb ell parlarem una mica sobre el festival que están muntant per al proper dia 3 de març en motiu del 9è aniversari de la festa i sobre els inicis i dia a dia d’ell i de Nasty. Madmax, muy buenas tardes!

A: Oye, ¿Cómo se empieza montando una fiesta en la calle Escudellers i se acaba llenando la Apolo cada lunes?

M: ¿La verdad? Sin pensarlo, básicamente. Es algo que nosotros empezamos hace 9 años como bien has dicho en la calle Escudellers, en un lugar bien guapo que se llamaba Fonfone; y en un principio la idea cuando empezamos a montar la fiesta era hacer una fiesta para nosotros y nuestros colegas, con la música que nos gustaba en ese momento y que nos sigue gustando ahora pero, básicamente no teníamos ninguna expectativa de nada más que tener una fiesta con nuestras influencias y lo que nos gustaba a nosotros. Gracias a Dios, la cosa fue creciendo y, a medida que pasaba el tiempo, se nos iban quedando chicos cada sitio al que íbamos, se nos quedaba más pequeño, más pequeño… y realmente nosotros teníamos como un sueño la Apolo por la sala. Siempre nos pareció la sala más guapa de Barcelona. Y también por lo que hacíamos nosotros: un escenario grande, poder poner bandas… podíamos jugar mucho más. Entonces, empezamos a pensarlo en el momento en el que vimos que teníamos capacidad para llenar una Apolo. Obviamente, al principio, ni se nos había cruzado por la cabeza ni que fuéramos a pinchar en otro sitio que no fuera en nuestra fiesta.

A: No eráis conscientes de la magnitud que podíais llegar a tener.

M: Yo siempre tengo la teoría que las cosas siempre salen cuando uno no las busca. Los Guns n’ Roses o los Rolling Stones cuando empezaron a tocar no estaban pensando en ser famosos, les salió porque eran ellos, porque fueron auténticos y hacían lo que ellos realmente querían; no lo que otros les decían. Y eso fue un poco lo que nos pasó a nosotros. Nosotros siempre hicimos lo que nosotros quisimos.

A: Seguisteis vuestros pálpitos y vuestras aficiones.

M: Exacto, seguimos nuestros pálpitos, seguimos nuestras aficiones, plasmarlo en una fiesta y así sucedió.

A: Y os ha ido muy bien, y lo hacéis muy bien.

M: Quejas no tenemos. Nos lo pasamos bien.

A: Y la idea de montar una fiesta los lunes, ¿De quién fue? Porque los lunes es un día en el que habitualmente la gente no acostumbra a salir de fiesta.

M: Esto fue una casualidad. Nosotros teníamos un amigo que trabajaba en el Fonfone y el único día que tenían más o menos disponible era el lunes. Cuando nos llegó la idea dijimos “¿por qué no?” ¡Si la fiesta va a ser para nosotros y para nuestros amigos y gente que invitemos nosotros! Y entonces ahí vimos la gracia: la gente que venga los lunes vendrá porque quiere, no como en un fin de semana que pasa y entra.

A: Buscabais que la gente que fuera realmente lo viviera.

M: ¡Exacto! ¡El que quiera se lo tiene que currar y venir un lunes!

A: He estado visitando algunas páginas web y blogs donde se hablaba de vosotros, y sólo veo comentarios positivos sobre la fiesta. ¿Qué le dais a la gente para que hable siempre tan bien de vosotros? ¿Qué hacéis de especial para que la gente hable tan bien?

M: Creo que lo que tiene Nasty Mondays es que es el concepto de que es un club. Toda la gente que viene repite todos los lunes, es como una familia. Todo el mundo sabe que va allí y se encontrará al tío que conoció a una tía que le gustó y luego la perdió, pero sabe que el lunes que viene la tía va a volver… es un poco así, es una gran familia. Eso genera que la gente vaya y se conozcan las caras aunque sean más de mil personas. La gente sabe a lo que va, sabe el público que hay, a quién se va a encontrar… Entonces, ese ambiente de que somos todos una gran fiesta es lo que la hace bastante especial, además de por esos motivos todos terminan ligando y la gente está contenta: va a una fiesta con buena música donde no hay códigos. Acá cada uno es como es y puede que sea un poco eso. Las tías que les da por vestirse bien e ir a un club y hacerse las pijas, los lunes les gusta ponerse las All Star y sudar.

A: Y hacerse las malas, no?

M: Exacto. Al fin y al cabo, están relajadas, no hay presión. “Voy con mis All Star, sudo y no tengo que estar ahí posando y…”

A: …¡No me tengo que preocupar por dar una imagen, simplemente vengo a pasarlo bien!

M: Exacto. A pasarlo bien, a bailar y a disfrutar de la música; que al ser distinta hace que la gente se vuelva loca, sumado a la locura que hacemos un poco en el escenario con Sören.

A: Quizá también el tema de conservar la esencia de esa fiesta donde todo empezó. Porque, al fin y al cabo, todo esto de ser malo, toda la parafernalia, toda la imagen que lleváis detrás empezó allí, en la calle Escudellers, la habéis sabido conservar.

M: Sí. Nosotros ya somos grandecitos, y siempre fuimos así y siempre lo seremos. Yo esto no lo voy a cambiar. Si mañana se pone de moda el Hip-Hop a muerte, yo no voy a cambiar, nosotros no vamos a cambiar ni ir por ese lado porque esté de moda… seguiremos haciendo lo que seguimos haciendo por más que vengan doscientas personas.

A: Los viejos rockeros nunca mueren

M: Exacto. Somos así y no lo vamos a cambiar.

A: Nasty Mondays ha traspasado las fronteras de la Sala Apolo, ha llegado a otros lugares de España y a otros países; hemos llegado a ver sesiones Nasty Mondays hasta en Múnich. Para este año, ¿Tenéis algo encaminado en este sentido?

M: Realmente, algo fijo no, siempre nos van llamando de sitios y vamos saliendo por Europa. Estuvimos hace un año y medio haciendo la fiesta en Nueva York, en una sala del Soho. Fue muy divertido, una muy buena experiencia, pero llegó un momento que nos cansábamos mucho todos los meses. Ir hasta Nueva York para montar una fiesta, mover toda la infraestructura… era complicado. Llegó un momento que decidimos dejar de hacerlo mensualmente y decir “si nos van saliendo bolos como los de Múnich…”. Estamos muy metidos también ahora con el tema del Snowboard, entonces en temporada de invierno, donde hay eventos Snowboard por Europa, los DJ por lo general somos nosotros.

A: ¡Y que siga así!

M: Esperemos que sí.

A: Sabemos que habéis hecho de todo en la Sala Apolo. He llegado a ver incluso, en vuestra página, que montasteis una half con skaters.

M: Sí, intentamos mezclar todas nuestras influencias. Nosotros somos viejos skaters, snowboarders… entonces intentamos meter eso en el concepto de la fiesta.

A: ¿Para el día 3 tenéis pensado hacer algo así?

M: Para el día 3 habrá sorpresas, habrá explosiones y habrá más locura de la normal. Igual hacemos una preparty en nuestro garage – oficina a la que invitamos a la gente más amiga, VIP’s… haremos un catering, tendremos DJ’s… y luego ya iremos todos para la sala donde la montaremos bien.

A: Hablando de VIP’s, sé que tenéis muchos amigos, entre ellos el actor Maculay Culkin, que siempre que puede asiste a vuestras sesiones, especialmente a los aniversarios. Para este noveno aniversario, ¿Aparecerá por allí?

M: Lo hemos invitado pero no ha contestado todavía porque debe andar liado. Me imagino que no, pero bueno, nunca se sabe, porque está viviendo en París ahora; así que si puede tomar un avión vendrá… Pero no tengo constancia de que sea así.

A: ¿Se quedará Sólo en casa?

M: Si, probablemente sí. Este es un ejemplo de cuando fuimos a Nueva York; nos hicimos colega de él justamente por tener la fiesta allí en Nueva York.

A: Me gustaría hablar contigo ahora un poco sobre la música que ponéis. No creo que sea solo una percepción mía, pero creo que el rock ahora no es lo que más suena en las pistas de baile. Si vamos a las principales salas, no sólo de Barcelona, sino de España, el rock no es lo que más suena ahora mismo. ¿Crees que el rock está perdiendo fuerza hasta el punto que se ha convertido en un género para un público muy determinado, incluso un tema fetiche?

M: Creo que hoy en día está todo un poco mezclado. Franz Ferdinand saca ahora un nuevo disco y a los diez minutos ya tienes un montón de remixes de los temas del disco. Creo que el rock no ha muerto. El rock nunca va a morir. Es uno de los primeros estilos musicales, la actitud y la rebeldía la gente la va a tener siempre… y el rock es eso. Igualmente, a nosotros  eso nos juega a lo mejor en ventaja porque al ser los únicos, habrá un montón de gente que le guste el rock y no tendrá ningún otro lugar al que ir que a un Nasty Mondays.

A: Entonces, ¿El rock se va a conservar? Quizá sean otros estilos los que van de capa caída.

M: Hay modas. Hace un año estaba de moda en Drum&Bass, y todos con el Drum&Bass… Pero son modas. El rock existió siempre y no va a dejar de existir. Y siempre habrá juventud a la que le guste el rock.

A: Como por ejemplo nuestros oyentes. Gente que estará contenta de oír que hay gente comprometida con el rock y que no va a dejar que se venga abajo […] Para preparar musicalmente un Nasty Mondays, ¿hacéis un trabajo previo importante o llegais a la sala y según el ambiente hacéis?

M: Esto es un tema que siempre he defendido con Sören: somos los peores DJ’s del mundo. ¡Jamás, en nuestros nueve años hemos preparado una sesión! Es más, ¡No tenemos grabada ni una sola sesión! Nunca nos lo planteamos. Como nunca nos consideramos DJ’s, somos pinchadiscos, más bien selectors, tampoco mezclamos demasiado. Obviamente mezclamos mejor que hace nueve años, pero tampoco nos interesó la técnica… El rock es así y se pone como viene. También tenemos la suerte que… es como Messi: “Si jugás en el Barça y jugás en el estadio una vez por semana, la práctica te hace”. Nosotros tenemos la suerte que, cada lunes, pinchamos para tanta gente y ya no necesitamos nada, sólo nos miramos y ya sabemos cuál va a ser el próximo tema. Que también es bueno (no tener preparados los temas), porque así la sesión no sale siempre igual. Depende de si vas más o menos borracho, más o menos triste, te sale que a veces conectas mejor que otras. Pero, al no estar planeado, es bueno. A parte, para nosotros, si lo tuviéramos todo planeado cada lunes… me mato a los tres lunes. Sería muy aburrido para nosotros. Entonces, preparar, no preparamos nunca. Lo único que preparamos siempre es antes de salir: “oye, arrancamos con este, seguimos con este y luego ya veremos”. Porque también es importante el público y leer el público. Si lo tienes todo preparado no puedes cambiarlo; en cambio, si nosotros vamos jugando con el público y vemos que el público está apagado, ponemos un rock más fuerte para que bailen más o menos.

A: Eso es un punto a favor muy importante para vosotros, porque el hecho de ir interpretando la pista y lo que piden no es algo que pueda hacer todo el mundo.

M: Yo siempre digo que es lo más importante. He visto DJ’s buenísimos, de puta madre, pero que no sabían leer la pista. Tu pinchas para gente, tienes que ver lo que la gente está pidiendo… tienes que saber llevarlo. Si no sabes leer la pista, mal.

A: Sabemos que Sören es un gran coleccionista de pinballs. ¿A MadMax qué le gusta coleccionar?

M: Tanto Sören como yo coleccionamos skates antiguos, pero soy más coleccionista de ropa. Antes de Nasty Mondays trabajaba en una tienda de ropa vintage de segunda mano y tengo toneladas de ropa, de camisas cowboy… siempre fui un friki. Pero, ahora que lo pienso, lo que siempre coleccione fueron gafas. Tengo como doscientos pares de gafas.

A: Es una buena colección.

M: Sí, tengo gafas raras y cosas… es algo que me gusta coleccionar.

A: A todos nuestros invitados les decimos siempre dos cosas. Una es: ¿Crees que hay algo que nos hayamos olvidado comentar?

M: Que vengan el lunes todos borrachos a Nasty Mondays. Están todos más que invitados. Será una fiesta en familia, de modo que si quieren formar parte de la familia están todos bienvenidos.

A: Allí nos veremos. Y después, una recomendación musical para añadir a nuestra Crappy List.

M: Recomiendo un tema nuevo, que todavía no ha salido el disco nuevo, de un grupo inglés que se llama The Crookes, y el tema se llama Play Dumb.

A: Perfecto, pues lo añadimos a nuestra Crappy List para la próxima semana. Llegados a este punto sólo nos queda agradecerte a ti y a toda la gente de Nasty Garage la atención prestada y a nuestra audiencia recordaros: el lunes 3 de marzo, noveno aniversario de Nasty Mondays en la Sala Apolo, con Sören y MadMax. Podéis sacar vuestras entradas con consumición incluida de manera anticipada en la web de la Sala Apolo por 14 euros, o en la misma taquilla de Apolo por 15. Y como siempre, para cerrar nuestra entrevista, agradecerte de nuevo la atención y desearos muchísimas felicidades y que cumpláis muchísimos años más, que os necesitamos por el ambiente de Barcelona.

M: Muchísimas gracias a vosotros.

A: Nos vemos por Apolo Madmax!


M: Dale, gracias.



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